Hay días en los que invitas a tus amigos a cenar a casa y ya has pensado en el súper plato con el que los vas a sorprender y, sobretodo, ese postre del que piensas que hablarán durante días. Bueno, no es para tanto, pero siempre es bueno fantasear y subirse un poco el autoestima jeje.
Vas al supermercado con la lista de cositas que necesitas y justo cuando crees que tienes toda la cena bajo control te encuentras con que no tienes ningún entrante!!! Ahhhh!!! entras en pánico y piensas, ¿llamo a mi amigo aquel que cocina muy bien y le pido un consejo? o ¿llamo a mi madre y le pido esa receta que nunca falla? o haces como nosotros y recurres a tu buen amigo Google e introduces en el buscador literalmente «entrantes fáciles» y entonces es ahí cuando te colapsas ya que son miles y cientos las recetas que aparecen, y cada cual más complicada. O al menos a primera vista así lo parece.
Así que se nos ocurrió la súper idea que no nos podía fallar; muy confiados nos dirigimos a la web de Martha Stewart y buscamos en la sección de entrantes. Y es que nos encanta esa página, tiene tantas ideas y todas con unas fotos tan preciosas y cuidadas que se hace muy fácil visualizar los resultados. Entonces encontramos estos champiñones y nos aventuramos a hacerlos, se veían bastante simples, pero con una combinación de ingredientes muy buena.
Llegamos a casa y los preparamos cruzando los dedos para que estuvieran ricos y la gran sorpresa fue que cuando los pusimos en la mesa no hubo otra expresión más que Mmmm…de verdad fue toda una sorpresa y además muy fácil!! No se puede pedir más!! Es por eso que hoy quisimos dedicarle una entrada en nuestro blog.
En la receta original no se especifica el tipo de champiñón, pero a nosotros nos encantan los Portobello, ya que tienen un sabor muy característico y una textura suave.
Ingredientes:
- 12 champiñones Portobello medianos (calculad unos 2 por persona)
- 2 rebanadas de pan de molde blanco
- 130g de queso de cabra (el que viene en rollito)
- Perejil picado al gusto
- 1/2 diente de ajo
- Sal y pimienta (una pizca)
- Aceite de oliva para engrasar la bandeja de horno
- Precalentamos el horno a 220º
- Colocamos el pan y el ajo en un procesador de alimentos y trituramos hasta que se hagan migas. Reservamos un poco para decorar al final.
- Con las migas restantes aun en el procesador agregamos el queso, el perejil, la sal y la pimienta y mezclamos todo hasta obtener una pasta homogénea.
- Ahora con un papel de cocina ligeramente húmedo limpiamos los restos de tierra que hay en los champiñones y con mucho mimo les quitamos los tronquitos para que se forme como un pequeño huequito para rellenarlos.
- Rellenamos con la pasta de queso y los colocamos en una bandeja o molde para el horno, previamente engrasado y colocamos encima de nuestros champiñones el resto de migas que habíamos reservado.
- Horneamos de 15 a 20 minutos hasta que el pan se torne dorado.
El otro dia en el super vi estos champis y ya estaba pensando con que rellenarlos. Muy buen idea con esa mezcla 🙂
Me quedo cotilleando tu cocina. Estoy de sorteo en mi blog por si te apete pasarte y ver si te gusta lo que hay 😉
Besinesssss