Hola a todos de nuevo, antes que nada queríamos pediros disculpas por nuestra ausencia. No os imagináis el sentimiento de culpabilidad tan grande que nos acompañó durante todo este tiempo y es que de verdad sentimos que os merecéis una explicación, así que vamos a empezar… recordáis que en una ocasión os mencionamos que teníamos algo muy especial entre manos, pues era nada más y nada menos que nuestra boda, sí sí, que nos hemos casado hace unos días y todavía no salimos del asombro y del estrés que nos acusaba día y noche. Así que para aliviar tantos de meses de trabajo y relajarnos un poco, pusimos rumbo a nuevos destinos.
Para nuestra luna de miel elegimos Hong Kong y Tailandia y una de las razones principales era para saborear y descubrir la comida asiática en su lugar de origen y su cultura milenaria. Nuestra primera parada Hong Kong, un lugar lleno de vida y muchas pero que muchas opciones de dim sum, que son unos pequeños bocaditos variados que inundan la ciudad desde el desayuno hasta la hora del té, reuniendo a miles de personas en sus variados y curiosos restaurantes. Tuvimos la oportunidad de tomar el té con una familia hongkonesa y realmente fue una experiencia que nos sirvió muchísimo para entender más a fondo sus costumbres y tradiciones.
En el collage de arriba os dejamos una selección de fotos de dim sum y un pastelito muy famoso llamado «moon cake», tradicional en esta época para celebrar la luna llena más grande del año.
En nuestro último día en Hong Kong tuvimos la oportunidad de ir a almorzar a una famosa cadena de restaurantes chinos en la que cuidan con detalle la preparación de todos sus platos, así que no dudamos en asomarnos en su cocina y tomar alguna que otra foto de su impresionante cadena de producción de dumplings.
Una vez empapados de la cultura de Hong Kong nos pusimos rumbo a nuestro segundo destino, Tailandia. Nada más llegar decidimos ir a un famoso mercado que tiene lugar en Bangkok todos los fines de semana, Chatuchak, encontrándonos una explosión de colores y sabores insuperables. Con una variedad de infinita de verduras, frutas, souvenirs y cientos de puestecitos de comida, en nuestra opinión es uno de los mejores mercados de Bangkok, si no el mejor.
Algunos días después, ya más familiarizados con sus comidas, nos animamos a tomar nuestra deseada clase de cocina, definitivamente este punto ocupa nuestro primer lugar en la lista de cosas favoritas de nuestro viaje.
Reservamos dos plazas en la escuela de cocina tailandesa Silom, un lugar precioso, con una decoración muy cuidada y llena de aromas sorprendentes producto de todos los tesoros culinarios que guardan en su interior.
Estos son los platos que preparamos en nuestra clase, Pad Thai (fideos de arroz con gambas), Tom Yum Goong (sopa de leche de coco con gambas) y Gaeng Kiew Wan Gai ( Curry verde con pollo). Un auténtico regalo para los sentidos, y es que la cocina Tailandesa tiene tantos aromas y equilibro dulce/salado en sus platos que hace de ella una comida muy gustosa y fácil de comer. Tanto es así que está valorada como una de las mejores gastronomías del mundo y nosotros damos fe de ello.
Otros mercados con una gran variedad en alimentos cocinados de manera Satay.
Posiblemente lo segundo en nuestra lista sea esta sección. Como ya es bien sabido, en Tailandia y otros países asiáticos, así como en América se suele cocinar con coco en todas sus versiones, pero concretamente la manera de preparar el helado de coco en Tailandia nos resultó algo adictivo. De hecho empezábamos a comer helados desde la mañana, y a lo largo del día repetíamos en casi todos los puestos que veíamos. Una delicia!!!
Estas son algunas de nuestras aventuras culinarias y fotos, esperadnos pronto con una nueva receta.
mmmmmmmmm todo tiene un pinta deliciosa, espero que lo pasarais muy bien y deseando estoy de que nos hagais algun plato de esos…voto por el curry ajajaja millones de besos, Eva
Enhorabuena!! las fotos preciosas. sin duda debe haber sido una experiencia inolvidable.
Un saludo
Angi
Muchas gracias Eva 🙂 un abrazo!!!
Gracias Angi, la verdad fue un experiencia muy linda y lo mejor la comida :). Prometemos perdernos menos de ahora en adelante.
Un saludo